¿Te muestras Amor?

Leí tanto de él que soñé con tenerlo

decidí por mi cuenta comenzar a buscarlo,

tomé varios caminos, algunos con la gran fe;

anhelaba ese encuentro

creía que cambiaría y de una vez empezaría a vivir,

entonces me animaba a seguir.

Llegó el día en que cansada y sin fe, me senté en tierra

lloré, lloré con lágrimas y con palabras también

¡es que he intentado encontrarlo, quererlo, atraparlo, esconderlo, tal vez!

Entre los silencios y con las prisas de buscar y no hallar

me resigné y acepté con excusas el llamado Capricho,

claramente me conformé con sus toques, sus besos y formas de ser…

pero no, nunca fue amor.

Salí herida y lastimada, hasta que con el pasar del invierno se irguió de nuevo mi cuerpo.

Por supuesto, con mi propia ilusión lo volví a buscar.

¿Quién es y dónde está? -pregunté a todos-

me propuse invitarlo, con un tono ya desesperado,

mas a mí no se acercaba y no encontraba razón.

¿Qué es o quien soy que no me ama?

Tengo un corazón como casa y en él no quiere habitar,

encuestaré a los amantes, a los afortunados

que en este instante, para su propio bien, mueren por él

para escribir los volantes, con secretos constantes

a los que como yo demandan de él.

Preciso encontrarlo, no como trofeo para admirar,

he madurado, además de querer hoy quiero dar,

crecer juntos, abrazando gigantes y bendiciones por igual 

por eso este llanto, mi canto…  ¿te muestras amor?